Con un gran volumen de hacienda, rapidez en el martillo y fundamentalmente buenos precios para los productores, se concretó el Remate Ganadero de Pequeños y Medianos Productores que ejecuta el Gobierno Provincial a través del Instituto de Desarrollo Rural y que forma parte de un paquete de medidas de ayuda a la situación de desastre por la sequía y de incendios, constituyendo una herramienta probada en años anteriores ante otras dificultades como el exceso de agua, que permitieron desahogar los campos por falta de pastos.
El epicentro de las actividades se desarrolló en el predio de la Sociedad Rural de General Paz ubicado a dos kilómetros del ingreso a la ciudad de Caá Catí, por ruta provincial N°5, encabezados por el Vicegobernador Pedro Braillard Poccard y contó con la presencia varios funcionarios, legisladores provinciales, concejales municipales y el intendente de local, Jorge Meza como anfitrión.
Tras la entrega de subsidios por parte del Gobierno Provincial, llegó el turno de la comercialización del ganado, el cual fue organizado de manera integral por el Instituto de Desarrollo Rural, quien, por instrucciones del Gobernador Gustavo Valdés, nuevamente subsidió el flete, derecho de pista y casa rematadora, con lo cual, el productor se lleva el 100% de las ventas, en un momento muy importante para el sector. “Desde el año pasado y por el tema de la pandemia se hizo la incorporación de la transmisión de los remates vía internet o televisiva, ya hace que haya muchos compradores que no estén aquí presentes físicamente, pero que puedan pujar por los precios”.
En esta oportunidad se alcanzó un encierre de casi 1200 cabezas y participaron 50 pequeños que a través de la firma Saenz Valiente Bullrich buscaban los mejores precios para los animales en pista. “Afortunadamente tuvimos un remate muy ágil con excelentes precios y principalmente se pueden liberar campos ya que los estudios indican que las lluvias no serán suficientes y la prioridad de alimentos serán para los vientres, que son la pieza fundamental para evitar que Corrientes y el país tenga pérdidas de terneros a futuro, con lo que eso significa para el sector, ya que nuestra Provincia es la segunda productora de terneros de la Argentina”.
Respecto de los precios, el Internventor del IderCor indicó “Se logró una venta cercana a los 60 millones de pesos, con un promedio de 400 pesos por kilo vivo de ternero liviano y 200 pesos el kilo vivo de lo que hace a vaca gorda, números muy buenos y que marcan referencia hacia el futuro”. Agregó que participaron productores de Lomas de Valllejos, Palmar Grande, Mburucuyá, San Miguel, Loreto, Caá Catí, Berón de Astrada, Concepción y Santa Rosa