Día instituido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1956, consagrado a la fraternidad y a la comprensión entre los niños y las niñas del mundo entero.
Para ese día, la ONU acordó que cada país debería promover actividades que involucrasen de manera directa a los más pequeños de cada casa. Los niños son el futuro, todos lo sabemos. Día a día padres, madres y familiares hacemos todo lo posible porque nuestros pequeños se enriquezcan de sabiduría que les hará grandes en un futuro y para ello tienen que ser felices.
De esto mismo se dio cuenta la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1956, cuando estableció el día 1 de Junio como el Día Internacional de la Infancia, porque no hay nada más importante que la felicidad de nuestros pequeños. El objetivo del Día Internacional de la Infancia es recordar a la ciudadanía que los niños son el colectivo más vulnerable y por tanto que más sufre las crisis y los problemas del mundo. Este día internacional recuerda que todos los niños tienen derecho a la salud, la educación y la protección, independientemente del lugar del mundo en el que haya nacido. En la Conferencia Internacional en Defensa de la Niñez la ONU acordó que cada país tendría que instituir en su calendario el Día Internacional de la Infancia o del Niño y en la fecha que quisiera cada estado.
0Principales derechos Los derechos de la infancia se basan en cuatro principios fundamentales:
[1] • La no discriminación: todos los niños tienen los mismos derechos. Esto significa: todos los niños y todas las niñas, en todo caso, en todo momento y sin excepciones. No importa su raza, su religión, su procedencia o las ideas de sus padres. Ningún niño debe recibir un trato injusto bajo ningún concepto.
• El interés superior del niño: cualquier decisión, ley, o política que pueda afectar a la infancia tiene que tener en cuenta qué es lo mejor para los niños y niñas. Cuando los adultos tomen decisiones tienen que pensar en cómo pueden afectar a los niños.
• El derecho a la vida, la supervivencia y el desarrollo: todos los niños y niñas tienen derecho a vivir, a desarrollarse y a alcanzar su máximo potencial en la vida. Esto incluye tener derecho a cosas como una alimentación y alojamientos adecuados, al agua potable, a la educación, a la atención sanitaria, al juego y el descanso, a actividades culturales y a información sobre sus derechos.
• La participación: los menores de edad tienen derecho a ser consultados sobre las situaciones que les afecten y a que sus opiniones sean tomadas en cuenta. Esto no significa que los niños puedan mandar sobre sus padres ni decirles qué tienen que hacer. La participación debe ir aumentando conforme a la edad y es importante para que los niños y jóvenes alcancen la madurez.
CENTRO DE EDUCACIÓN FÍSICA N° 10